Un trabajo artesanal desde siempre

Desde simples alambres de metal, hábilmente formados y soldados para crear formas nuevas y armoniosas, cobran vida las estructuras listas para encerrar la masa luminosa incandescente del vidrio fundido. En esta fase inicial, la estructura metálica se controla constantemente para evitar posibles cambios en la forma y el tamaño durante el soplado del vidrio. El vidrio, soplado dentro de la estructura por los maestros, se forma y modela sin la ayuda de moldes.